Hoja en blanco

.... difícil enfrentarte, poseerte, honrarte. Las palabras surgen lentamente tratando de no desdibujar tu pureza, invadiéndote, transformándote. Qué será de ti cuando yo termine contigo. A dónde irá tu inmaculada elegancia, qué harás con tantas frases que sangran y emergen de ti. Me odiaras o te darás cuenta de que somos el uno para el otro. No quiero nada más de ti. Solo tu cuerpo, solo tu blancura, quiero pintarte con mis manos, darte color, llenarte de contenido, contener tus ansias de acción, complacer tus deseos mientras se sacian los míos.

Llevamos tanto tiempo en este transformarnos que ya no te distingo de mi, tus dobleces, tu filo y tu delgadez parecen ser una extensión de mi y viceversa.

Que siga pues este juego de tintas y ausencia de colores, que se cumplan dos años y que ese blanco tuyo permanezca para mi. No puedo prescindir de él, no importa lo que vean los demás, yo veo todo y lo veo claramente. Me veo dibujandote y desdibujandome en ti, me veo entregado, loco muerto de celos por aquellos que se creen con derecho a usurpar ese blanco. tú me elegiste, tu blancura y mis letras, tu pureza y mis silencios, tu infinitud y estas ganas de no dejar de escribirte.

Hoja en blanco, mi blanco.